#41 - Subir posiciones en el draft: análisis y propuestas
Entre las distintas opciones que baraja la gerencia de Salt Lake City se incluye el buscar un traspaso para ascender algún puesto en el draft.
🆕 Subir posiciones en el draft: análisis y propuestas
Quedan 19 días para el draft de 2024.
Y nadie sabe con seguridad qué ocurrirá con el pick 10 que los Utah Jazz tienen a su disposición. No hablo sobre qué jugador elegirán, no —aunque ya compartí cinco opciones en la pasada entrega—, sino del interrogante de si la ronda se quedará o no en Salt Lake City.
Después de caer dos posiciones en la lotería del draft se compartió que Danny Ainge y Justin Zanik recibieron la noticia con indiferencia. Quizá porque en este draft el talento medio es bajo y poco importa elegir con el pick 8 o con el 10. Hacerlo un puesto más abajo hubiera supuesto enviar la selección a Oklahoma City y eso sí que hubiera sido un importante inconveniente. Al final suspiraron con alivio.
Las palabras compartidas tras la lotería por el vicepresidente de personal de los Jazz, Bart Taylor, siguieron esta línea:
"Obviamente no estoy contento. [...] Pero ya hemos estudiado el draft para el pick 8 y hay varios jugadores que nos gustan. Creo que podremos elegir a uno de ellos con el pick 10".
Entre los prospects que entrevistaron en el Draft Combine de Chicago se encuentran prácticamente todos aquellos a los que distintos mocks sitúan en el Top 10. Alex Sarr y Reed Sheppard son inaccesibles, mientras que otros nombres como los de Stephon Castle, Donovan Clingan, Ron Holland, Rob Dillingham, Cody Williams o Dalton Knecht oscilan mucho en función del mock consultado. En definitiva: desde el puesto 3 hasta el 10 en el que escogen los Jazz está todo en el aire.
Eso nos lleva a otro punto muy importante: hay equipos que quieren competir y que están más que dispuestos a traspasar su pick. Entre ellos los propios Jazz, pero también Houston (pick 3), Detroit (5) o Charlotte (6). Quizá incluso Portland (7).
Ainge dejó muy claro en la rueda de prensa de final de temporada que entre los planes no está el llegar al training camp con tres novatos más que añadir a una base ya de por sí muy joven. Es decir, Utah no utilizará sus picks 10, 29 y 32. Al menos no los tres.
Esto abre dos posibilidades. La primera, confeccionar un paquete con el pick 10, alguna futura ronda más y jugadores a elegir entre John Collins, Jordan Clarkson y Collin Sexton para intentar lo que Ainge definió como “la caza mayor”. Dudo mucho que los Jazz logren incorporar a una estrella este verano que encaje con esos términos y el draft de 2025 se presenta excepcionalmente cargado de talento como para dejar escapar a otro Victor Wembanyama.
La segunda posibilidad señala al trade up. Es decir, emplear las rondas y algún jugador para mejorar las opciones en este draft. Algo que solo harán si tienen muy claro el novato que quieren, aunque las palabras de Bart Taylor invitan a pensar que no están especialmente enamorados de ninguno. O que, por el contrario, el objeto de deseo supone poner sobre la mesa a Lauri Markkanen, algo que, de momento, no se plantean.
La analista Krysten Peek habla maravillas de Stephon Castle, a quien situó en tercera posición en su último mock. Rob Dillingham fue su elegido para los Utah Jazz. En un momento de su reciente charla con James Hansen, Peek aseguró que Castle sería una gran opción para los Jazz, pero que duda que estén dispuestos a ofrecer a los Rockets lo que estos pedirían por su pick 3. Esto nos lleva a otra información compartida por el medio KSL Sports esta misma semana.
De acuerdo con el periodista Ben Anderson, Detroit y Charlotte emergen como los socios comerciales más probables para los Jazz en caso de querer cerrar un acuerdo por sus rondas. Y tiene sentido: ambos están dispuesto a desprenderse de sus picks. Y sus selecciones, número 5 y 6, respectivamente, no son lo suficientemente altas como para exigir a Markkanen.
Ahora bien, ¿qué podrían ofrecer los Jazz que interese a las gerencias de los Pistons y los Hornets? Las dos primeras propuestas las compartió César Sanz en Twitter y me parecen realmente interesantes.
Los Pistons necesitan veteranía para, al menos, salir del pozo de la NBA y cuentan con hasta 64 millones de espacio salarial para operar este verano, por lo que pueden absorber los dos años restantes del contrato de Collins sin poner en riesgo su flexibilidad económica ni dar jugadores.
Por su parte, los Hornets ‘sacrificarían’ su pick 6, pero, a cambio, reciben otro lottery pick, una selección de final de primera ronda que obligará a su equipo de scouts a trabajar horas extra y liberar los 16 millones del contrato de Davis Bertans. Si logran desprenderse de él hablamos de que dispararían su espacio salarial hasta los 40 millones, lo que les permitiría rastrear la agencia libre con mayores garantías.
¿Qué ganan los Jazz? Básicamente el pick y, en el caso de Bertans, un contrato expiring que usar hasta el cierre de mercado. No es para tirar cohetes, pero tiene toda la pinta de que la temporada 2024-25 tampoco va a ser especialmente sencilla para nosotros como aficionados.
Yo también quiero proponer dos trade up: uno con los propios Hornets y un segundo con Houston sin necesidad de dar a Lauri Markkanen.
Cody Martin y Vasilije Micic son dos piezas secundarias en Charlotte y con una franja de edad que no encaja en el cronograma del proyecto. Jordan Clarkson tampoco es un chaval, pero causaría un impacto directo y reforzaría el puesto de guard ante los constantes problemas físicos de LaMelo Ball.
Utah conseguiría el pick 6 y Micic cumpliría como parche en el puesto de base hasta la llegada de uno que sea capaz de hacerse con el puesto durante muchos años.
Steven Adams me parece un buen mentor para reconducir la carrera de Walker Kessler. Aportaría músculo, intensidad, defensa y rebote durante su último año de contrato. O saldría en febrero a cambio de nuevos assets. Con Alperen Sengun y Jabari Smith Jr. no parece que Adams tenga mucho sitio en Houston. Clarkson puede ofrecerles muchos puntos desde el banquillo.
Y por el pick 3 doy las tres selecciones de este año sin que me tiemble la mano lo más mínimo. Esta ronda permitiría a los Jazz el escoger a cualquier jugador salvo, presumiblemente, Alex Sarr y Zaccharie Risacher. Que tampoco supone desgracia alguna.
Ya sabes que mis favoritos son Stephon Castle y Cody Williams, por lo que ascender hasta el pick 3 asegura poder escoger a uno de los dos. Y varios rumores señalan que los San Antonio Spurs, que cuentan con los picks 4 y 8, quieren un guard que situar junto a Wembanyama. Castle entre ellos. Si los Jazz están completamente seguros de que estarán disponibles con los picks 5 o 6 tampoco me volvería loco. Quedarse con el pick 10, muy probablemente, supone conformarse con el plan C, D o E.
¿Tú qué harías?
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¡Un abrazo y feliz fin de semana!
Jacobo León - El Cartero de los Jazz